Hace cuarenta años, un grupo de jóvenes vinculadas a los movimientos sociales, el ecologismo y la izquierda anticapitalista de liberación nacional decidieron autoorganizarse con el objetivo de crear una cooperativa de trabajo donde pudieran desarrollarse profesionalmente y personalmente. Los valores fundamentales de la cooperativa se basaban en los principios de la ayuda mutua, la responsabilidad, la democracia, la igualdad, la equidad y la solidaridad. Querían que la actividad socioeconómica de la nueva organización tuviera un impacto positivo en la sociedad, el medio-ambiente y las personas.

Con el paso de los años, otras perspectivas han complementado y enriquecido el marco conceptual y de acción del movimiento cooperativista y de la economía solidaria. Las aportaciones provenientes de otros ámbitos nos han permitido integrar contenidos a nuestras prácticas cuotidianas y desarrollar un marco teórico más rico y complejo.

Las economías feministas nos han dotado de herramientas para entender la sostenibilidad de la vida como un conjunto de procesos y recursos sociales necesarios para satisfacer las necesidades de las personas y crear las condiciones para una vida digna. Además, consideran esencial preservar la capacidad de reproducción de la vida misma, así como sus aspectos sociales, culturales y ambientales. [1] Las economías feministas también reconocen la singularidad de cada persona, ya que tienen en cuenta «la diversidad de deseos y necesidades» individuales. [2]

Por otro lado, el ecofeminismo nos ha aportado una visión interconectada e interdependiente del planeta, los ecosistemas y las personas. El discurso ecofeminista relaciona la crisis ecológica con las injusticias y las opresiones del sistema capitalista y patriarcal. Defiende una sociedad más respetuosa con la naturaleza y un mundo más justo y saludable, libre de actitudes opresores y patriarcales que afectan principalmente a los colectivos más oprimidos, como las mujeres. [2]

Situamos las personas y los cuidados en el centro de la organización

La incorporación de estos marcos de pensamiento nos obliga a reubicar las personas dentro de las organizaciones y reincorporar nuevas preceptivas que tengas exclusivamente en cuenta los cuidados. Esto implica que las organizaciones sean espacios donde se dé apoyo emocional y se tenga cura de un buen ambiente sin menospreciar las tareas productivas. [2] Como defiende la Asociación Colectiva Matriu «cuidarnos (…) implica, en primer lugar, poner la vida de las personas y del planeta como eje de nuestra actividad y motivo de ser. Es importante que el cuidado sea un objetivo y que busquemos momentos para reflexionar sobre como llevarla a cabo.» [2]

Según la cooperativa Fil a l’Agulla, los cuidados «implican una mirada hacia la vida interna de la organización que inevitablemente también supone una mirada hacia el exterior de las personas que la forman. [Los cuidados] activan ideologías y culturas organizativas antiguas, basadas en un modelo enfocado básicamente en la productividad y racionalidad y, en cambio, suponen la incorporación de la subjetividad y el mundo emocional, así como actitudes de apertura y curiosidad hacia fenómenos no necesariamente agradables como lo son el conflicto, la discrepancia, el dolor, la hostilidad o las emociones fuertes y el estrés.» [3]

Y es que querer situar los cuidados en el centro implica revisar muchos de los aspectos internos de un colectivo u organización: la cohesión, el trabajo en equipo y las emociones; el liderazgo y el uso del poder; los conflictos; el estrés; las dinámicas de discriminación; o la gobernanza, entre muchos otros. [4]

Así, en Arç Cooperativa llegamos a la conclusión que, una vez consolidados las prácticas fundacionales de democracia, igualdad y paridad de género dentro de la cooperativa, debíamos dar un paso hacia delante en la gestión de los cuidados y adquirir nuevas herramientas y recursos.

Incorporar miradas y prácticas más feministas

De este modo, desde 2017, hemos incorporado, de manera explícita, los cuidados de las personas dentro de nuestros marcos estratégicos con el objetivo de trabajar ciertas dinámicas de trabajo, el enfoque de los conflictos y la cohesión de grupo. Al mismo tiempo, hemos mejorado significativamente la calidad laboral y la conciliación personal y familiar. Hemos optado por una jornada laboral de 36 horas semanales y ofrecemos flexibilidad horaria para cuidar de nosotras mismas y de las personas miembros de nuestras familias.

Desde entonces, hemos recorrido un importante camino para mejorar la gestión de los cuidados dentro de la organización. Todo el equipo hemos participado en diferentes acompañamientos profesionales para profundizar en los cuidados y la gestión de conflictos, y hemos recibido asesoramiento específico para abordar conflictos concretos. Además, muchas de las cooperativistas nos estamos formando en liderazgo, cohesión de grupo y gestión de conflictos.

En paralelo, la economía solidaria en su conjunto ha avanzado en adoptar prácticas más feministas dentro de las organizaciones, especialmente en relación con la informalidad de las interacciones personales. En 2021, todas las entidades que formamos parte de la Xarxa d’Economia Solidària de Catalunya (XES) adoptamos el protocolo para la prevención y abordaje del acoso sexual por razón de género, identidad y expresión de género o preferencia sexual. Y este 2023, como entidad socia del Grup ECOS, hemos suscrito el protocolo para la prevención, la detección y el abordaje del acoso del Grup ECOS, que adapta las propuestas de la XES a un conjunto de métodos y prácticas propias de las cooperativas del grupo cooperativo.

En resumen, en Arç Cooperativa entendemos nuestro proyecto cooperativo de transformación ecosocial como un espacio cuotidiano de relaciones profesionales, vínculos personales y apoyo mutuo. Si queremos construir una organización y unas relaciones alternativas al capitalismo, basadas en la democracia, la horizontalidad y el bienestar de las personas, debemos examinar y replantear nuestros privilegios y las relaciones de poder, también dentro de nuestra organización, para construir una cooperativa basada en la confianza, el liderazgo participativo y el empoderamiento personal. 

Y es que nuestra apuesta por la transformación social respetuosa con las personas y los ecosistemas implica promover una organización habitable, es decir, una organización transparente y democrática, con liderazgos cooperativos, que impulse la participación, donde, a banda de los resultados, el bienestar de las personas y las relaciones tengan un papel central dentro de la organización. [1]

 

Referencias

  1. Carlos Askunze, Yolanda Jubeto, Luciana Marcó y Zaloa Pérez (2020): «Diccionario feminista para una economía solidaria». REAS Euskadi. https://reaseuskadi.eus/wp-content/uploads/Diccionario-Feminista-2020-cas.pdf
  2. Matriu i Consell Nacional de la Joventut de Catalunya (2016): «Traçant vides dignes: cap a una economia feminista. Guia de recursos per aplicar la mirada feminista de l’economia als espais associatius». https://matriu.org/sites/default/files/project/pdf/tracant_vides_dignes_cap_a_una_economia_feminista_1.pdf
  3. Fil a l’agulla, SCCL: «Les cures a les organitzacions» Fil a l’agullahttps://filalagulla.org/que-fem/les-cures-a-les-organitzacions/
  4. Fil a l’agulla, SCCL: «Manual d’autodiagnosi. L’estat de les cures a la nostra cooperativa» Fil a l’agulla. https://filalagulla.org/wp-content/uploads/2021/01/Manual_Autodiagnosi1.pdf
  5. Noemí Canelles i Mireia Parera (2022): «Manual de cures a les comunitats. Com podem aplicar l’ecofeminisme als projectes de vida en comunitat? Fil a l’agulla. https://filalagulla.org/wp-content/uploads/2022/06/Manual-de-cures-comunitats_OK-010622.pdf

Para redactar este artículo también hemos consultado

  1. Mireia Duran Bruguera i Mariona Zamora Juan (2018): «Com incorporar l’ètica de la cura i la perspectiva feminista a la nostra entitat» Sentit Crític https://www.elcritic.cat/noticies/com-incorporar-letica-de-la-cura-i-la-perspectiva-feminista-a-la-nostra-entitat-14107
  2. Ecologistas en Acción (2022): «Guía de cuidados» Ecologistas en Acción https://www.ecologistasenaccion.org/wp-content/uploads/2022/10/guia-de-cuidados.pdf
  3. Lafede.cat – Organitzacions per a la Justícia Global (2018): «Perspectiva feminista i ètica de la cura. Guia d’autodiagnosi per a organitzacions» Lafede.cat http://lafede.cat/eticadelacura/wp-content/uploads/2019/01/SembrantCures_Guia-1.pdf